¡Muy buenas! Por aquí andamos otra vez :)... Llevo unos días pensando en hacer una entrada sobre las cosas que voy haciendo en cuanto a costura se refiere, mis pequeños logros, no son gran cosa, pero a mi me hacen mucha ilusión, ya que soy autodidacta, todo lo que sé lo he aprendido viendo a mi abuela o curioseando por Internet.
Y dándole vueltas a todo ésto hice fotos a las dos máquinas de coser que tengo. La eléctrica, que me la regaló mi abuela Rafa, y es la que más uso. La otra es una "reliquia" que aún funciona (y muy bien), es una Singer, ni más ni menos ;), y la cual me regaló mi abuela Visi.
Me puse a pensar en la historia que me contó mi abuela Visi sobre la Singer, que perteneció a su madre y que la tuvieron que esconder bajo tierra durante la Guerra Civil para que no se la quitaran y la transformaran en quién sabe qué (metralla, por ejemplo). También me contó lo que les costo en pesetas y que la tuvieron que pagar a plazos.
Ésta es una de las muchas historias que he tenido la suerte de escuchar de mis cuatro abuelo. ¡Síiiiii... habéis escuchado bien! He tenido el privilegio y el placer de conocer a mis cuatro abuelos. El primero en irse fue mi abuelo Florencio, yo tenía 24 años, así que he podido aprender mucho de él y conocer sus pequeñas "manías", como dejarse un trozo de pan al final de la comida para tomárselo con la fruta, fuese lo que fuese, sandía, naranja, melón, plátano... je je.
He disfrutado de mis cuatro abuelos muchísimo, y lo sigo haciendo, porque todavía sigo aprendiendo de mi abuela Rafaela y mi abuelo Ángel, al cual no os había presentado todavía, jeje, un cabezota empedernido, pero con un corazón de oro. De mi abuela Rafa, ha sido de la que he aprendido algo de este mundo tan complejo e increíble de la costura, el cual me encanta. Fue modista y aún hoy le hace un vestidito a mi peque, como un jersey a mi otro peque ;)
Siempre me ha gustado pasar tiempo con ellos y aprender de ellos. Tuve una temporada que iba detrás de mis abuelas para hacer una recopilación con sus mejores recetas. Me acuerdo que me desesperaba al principio porque me decían pon un poco de ésto o un puñado de aquello, ¡¡¡yo necesitaba saber las cantidades exactas, éso no me servia!!! Y mirarme ahora, cuando alguien me pregunta por una receta me pasa lo mismo que ellas, je je.
Como os he dicho antes, me siento muy afortunada de haber disfrutado, y seguir disfrutando, de mis abuelos. Me parecen una figura fundamental en la vida de todo niño y niña. A mi me encanta que mis peques pasen tiempo con sus abuelos y bisabuelos, me parece muy enriquecedor para ambas partes ;)
A mis abuelos Florencio, Visistación, Ángel y Rafaela, os quiero.
